Como no podía ser de otro modo, llega el lunes y llueve. Qué rollo, lo bueno es que tengo mil cosas que hacer hasta que Papà Oso vuelva a casa y se quede con el bichillo para que me vaya a la clase de noruego. Noruego!!! Los deberes. Sí, el caballo de batalla de todo estudiante, bueno, aquí es algo diferente a España, tanto en tema del sistema educativo formal, sus asignaturas, calificaciones y objetivos. Y esto me permite mostrar uno de los primeros choques culturales.
Como habéis podido ver en mil y un documental, en los países nórdicos se lleva un programa muy distinto al que nuestra tierra patria somete a los retoños ibéricos.
Para esta primera entrada os contaré el primer tramo: Preescolar, que es hasta los 6 años.
De primeras la mamá, si tiene derecho porque ha cotizado lo suficiente (creo que un año), puede elegir una baja de 8 meses con el 100% del sueldo, que continuará el papá, si igualmente ha cotizado, por dos mese más y el mismo porcentaje de sueldo.
Si por el contrario, quieren ampliar el tiempo de bajá materno a un año el porcentaje de sueldo baja al 70%, y el papá estará igualmente dos meses pero con un 70% igual al materno.
Esto supone que los bebés raramente entran en la barnehage antes de los 8 meses, por lo que ya no son tan dependientes. Todas valen casi lo mismo, cierran sobre las 16,30h y se suele llevar la comida en lo que llaman un matpak, que no es más que un tupper con un tentempié frío que lo toman sobre las 11.
Por otro lado, existen unos espacios que se denominan åpenbarnehage,que los suelen gestionar las iglesias del lugar (usualmente luteranas). Ahí puedes ir con tu bebé/niño en horario flexible matinal para hacer actividades y sociabilizarse con otras mamás y bebé, además de actividades dirigidas por un profesional (o estudiante de educación). En estos lugares pagas por día una media de 4€.
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